Aunque son dos términos que estamos acostumbrados a utilizar de manera indiscriminada, lo cierto es que cirugía plástica y cirugía estética no hacen referencia la misma realidad, a pesar de ser conceptos que, obviamente, están muy relacionadas.
¿Quieres conocer qué diferencia un tratamiento de cirugía estética de uno de cirugía plástica? Te lo contamos a continuación en este artículo.
Definición básica de cirugía plástica y cirugía estética:
Pues para conocer la diferencia entre estas dos ramas de la cirugía, vamos a acudir a su definición más académica y analizar la clave de su distinción:
1.- La cirugía plástica tiene como principal objetivo reparar y reconstruir el tejido y/o la piel que faltan o se han dañado ya sea por enfermedad, accidente… Es decir, existe un problema de salud previo que requiere una intervención sobre la que después se aplican técnicas plásticas para mejorar el aspecto o minimizar las consecuencias visibles que deja esa operación.
2.- La cirugía estética, sin embargo, moldea, modifica, repara y transforma tejidos o partes del cuerpo sin que exista una patología previa. Es decir, una intervención estética siempre estará motivada por fines estéticos (aunque en algunos casos sirvan para mejorar la funcionalidad como ocurre en algunas rinoplastias).
¿En qué casos suele utilizarse la cirugía plástica?
La cirugía plástica, que recordamos que aspira a mejorar el aspecto de una personas (o más bien de una parte de su cuerpo) tras haberse sometido a una intervención quirúrgica o a un tratamiento clínico, se suele utilizar para reparar:
- Anomalías que han existido desde el nacimiento y que afectan a la personas a nivel funcional y estético como el labio leporino, los dedos palmeados o los nevus de nacimiento
- Áreas dañadas por la eliminación de tejido canceroso, como la cara o el pecho
- Quemaduras extensas u otras lesiones graves que suelen estar causadas por accidentes.
Las intervenciones de cirugía plástica ayudan a mejorar la autoestima de pacientes que en algunos casos, como puede ser un cáncer de pecho o quemaduras tras un incendio, necesitan reponerse tanto a nivel físico como anímico. Y en este sentido, estas cirugías suelen ayudar a mejorar la autoestima, a afrontar mejor la enfermedad o el accidente, a sentir más confianza y a, en general, mejorar la calidad de vida de los pacientes.
¿Cuáles son las técnicas más utilizadas en esta cirugía?
- Injertos de piel: donde se extrae la piel sana de un área del cuerpo no afectada y se usa para reemplazar la piel perdida o dañada.
- Cirugía de piel colgante: en la que se transfiere un trozo de tejido de una parte del cuerpo a otra, junto con los vasos sanguíneos que lo mantienen vivo; se llama así porque el tejido sano generalmente permanece parcialmente adherido al cuerpo mientras se reposiciona.
- Expansión del tejido: donde el tejido circundante se estira para permitir que el cuerpo «crezca» piel adicional, que luego puede usarse para ayudar a reconstruir el área cercana.
Además de estas técnicas, los cirujanos plásticos también utilizan muchos otros métodos, como:
- Transferencia de grasa o injerto: donde la grasa se extrae de un área y se inserta en otra área, generalmente para corregir las irregularidades.
- Cierre por vacío: donde se aplica succión a una herida a través de un trozo de espuma estéril para extraer líquido y estimular la curación.
- Dispositivos protésicos, como miembros artificiales.
Como ves, siempre se tiende a pensar que la cirugía plástica está orientada a mejorar el aspecto de las personas, y así es, pero siempre después de atravesar un proceso médico que en muchas ocasiones puede ser complejo. De hecho, muchos pacientes tardan tiempo en someterse a intervenciones plásticas porque necesitan recuperarse de los problemas de salud que han propiciado que también necesiten de esta rama de la cirugía, aparentemente banal pero clave para muchas personas.