Cuidar de nuestros dientes, encías y boca debería ser una prioridad para todos nosotros. Sin embargo, incluso prestando atención, es posible que cometamos ciertos errores de higiene bucodental que nos pueden causar diversos problemas. Vamos a tratar de presentarte los más relevantes en estas próximas líneas. ¡No te los pierdas!
Nos preocupa tu salud en general y tu salud bucodental en particular. Por eso, son varias las veces que ya hemos utilizado este espacio para acercarte ciertas recomendaciones. Por ejemplo, no hace demasiado ya os comentamos algunos cuidados para los implantes dentales que os van a permitir disfrutar de un éxito total en este procedimiento. Te recomendamos esta lectura.
Pero hoy vamos a dirigir nuestra atención a otro lugar. Concretamente a esos fallos que cometemos a diario en nuestra higiene bucodental de manera casi inconsciente y que pueden perjudicarnos gravemente, tanto a corto como a largo plazo.
Conoce los principales errores de higiene bucodental que cometemos día tras día
En nuestra opinión, estos son los fallos más habituales:
- No cepillarse los dientes correctamente.
Uno de los errores de higiene bucodental más comunes es no cepillarse los dientes de manera adecuada. Es importante cepillarse los dientes al menos tres veces al día, durante al menos dos minutos cada vez, utilizando movimientos suaves y circulares. Asegúrate de cepillar todas las superficies de los dientes, incluidas las superficies internas y externas, así como la superficie de masticación y justo en la intersección entre dientes y encías. - No usar hilo dental.
Muchas personas no usan hilo dental de manera regular o no lo usan correctamente. El hilo dental es crucial para eliminar la placa y los residuos de alimentos que se acumulan entre los dientes y a lo largo de la línea de las encías, donde el cepillo de dientes no puede llegar. Asegúrate de usar hilo dental al menos una vez al día, deslizándolo suavemente entre cada diente y a lo largo de la línea de las encías. También puedes apostar por la utilización de cepillos interdentales. - No cambiar el cepillo de dientes regularmente.
¿Cada cuánto cambias tu cepillo de dientes? Otro fallo típico común es no cambiar el cepillo de dientes con la frecuencia suficiente. Los cepillos de dientes desgastados no limpian eficazmente los dientes y pueden albergar bacterias dañinas. Se recomienda cambiar el cepillo de dientes cada tres meses (como mucho), o antes si las cerdas están desgastadas o si has estado enfermo. - No visitar al dentista regularmente.
Muchas personas descuidan las visitas regulares al dentista, lo que puede llevar a problemas dentales no detectados y a un deterioro de la salud bucal. Es importante visitar al dentista al menos dos veces al año para realizar limpiezas dentales profesionales y chequeos dentales regulares. El dentista puede detectar problemas dentales en etapas tempranas y proporcionar tratamiento adecuado para prevenir complicaciones futuras.
¿Reconoces algunos de estos errores de higiene bucodental que acabamos de contarte? Si es así, te animamos a ponerles solución cuanto antes.